Los pulmones son el centro del sistema respiratorio y tienen dos funciones principales: una es obtener el oxígeno del aire que va hacia el cuerpo y otra es eliminar el dióxido de carbono.
No obstante, son el órgano más vulnerable a las infecciones y a las lesiones del ambiente externo, debido a la exposición constante a partículas, productos químicos y organismos infecciosos en el aire.
Es por ello que el portal portugués de salud, nutrición y bienestar Tua Saúde reveló que “el tomillo es rico en sustancias con acción antiinflamatorias, expectorantes y antitusígenas, como el carvacrol y el γ-terpineno, que ayudan a eliminar el acceso de catarro de las vías aéreas y combatir la tos causada por resfriados, bronquitis, asma, inflamación de la faringe o coqueluche”.
Respecto al consumo, señaló que las principales formas medicinales de usar el tomillo son:
Té de tomillo: para preparar el té se deben colocar dos cucharadas de hojas picadas en una taza de agua hirviendo y dejar reposar por diez minutos. Después, se cuela y se bebe hasta tres veces al día. Si se desea, se puede endulzar con miel, que también ayuda a hidratar la garganta, aliviando en los casos de tos.
Jarabe de tomillo: adicionar una rama de tomillo seco en tres tazas de agua hirviendo en fuego bajo hasta que el agua se evapore, disminuyendo un tercio de la cantidad inicial. Después, apagar el fuego y dejar reposar cerca de tres minutos. Luego, cuando estuviera tibio, retirar la rama de tomillo y adicionar media taza de miel. Finalmente, tomar una cucharada de jarabe de tomillo cada vez que sea necesario y guardar el jarabe en un frasco de vidrio limpio y seco en la heladera, hasta por dos meses.