Los autores
explican en un nuevo artículo publicado en la revista Nature Medicine, que el
COVID-19 es hoy reconocido como una enfermedad multiorgánica con un espectro
amplio de manifestaciones con efectos que pueden durar semanas o incluso
volverse crónicos.
“Definimos COVID-19 posaguda como síntomas persistentes y/o complicaciones tardías o a largo plazo de la infección por SARS-CoV-2 más allá de las 4 semanas desde el inicio de los síntomas”. Estos se divide en dos, según el artículo: síntomas presentes entre 4 y 12 semanas después de la enfermedad y síndrome postcovid o crónico, que incluye síntomas persistentes 12 semanas después de la enfermedad.
Este es el resumen de algunos de los síntomas descritos en Nature según los órganos que se ven afectados:
- Pulmonares: Los pacientes sobrevivientes del coronavirus han mostrado disminución en la capacidad pulmonar en distintos sentidos.
- Cardiovasculares: Algunos de los síntomas más persistentes pueden incluir palpitaciones, disnea (ahogo o dificultad para respirar) y dolor en el pecho.
- Hematológicos: Los trombos o eventos tromboembólicos (coágulos de sangre) se han presentado en menos del 5% de los casos de covid-19 largo estudiados.
- Neuropsiquiátricas: Las anormalidades frecuentes más identificadas también incluyen fatiga, dolores de cabeza, mialgia y deterioro cognitivo (niebla mental).
- Dermatológicas: La caída del pelo es el síntoma predominante en este sentido, pues lo han reportado cerca del 20 por ciento de los sobrevivientes del virus.