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Cameron Boyce se dio a conocer como actor de Disney, pero para el joven no todo era la fama, pues quería dejar un legado a través de su labor altruista.
Precisamente en sus últimas entrevistas, el tema de su trabajo caritativo era una constante. Cameron colaboraba con una organización benéfica para llevar agua potable a millones de personas en el mundo.
En dicha plática se reconoció como un joven con “alma vieja” y recordó una anécdota del por qué esa autodefinición.
Durante un viaje con sus padres, cuando era muy pequeño, “una anciana señaló a mi papá que yo era un alma vieja. Por qué lo dijo o cómo llegó a esa conclusión, no tengo idea, pero creo que es una evaluación precisa de mí. Una conclusión mucho más fácil de alcanzar ahora de lo que hubiera sido entonces”.
Boyce dijo que sus deseos de ayudar fueron inspirados por una familia de hombres y mujeres fuertes que le enseñaron lo que era dar de regreso.
El joven explicó que él trataba de ser el puente para esas personas que querían ayudar pero no sabían cómo hacerlo.
También se refirió a su abuela paterna, Jo Ann Boyce, quien era una de las “12 de Clinton”, un grupo de estudiantes que lideró la integración de una escuela de Tennessee hace más de 50 años.
“Es una gran parte de quien soy. Ser afroamericano y judío. Tengo muchos ancestros y familiares a los que veo por su fortaleza”.
El joven falleció el 6 de julio mientras dormía. El joven de 20 años sufrió un ataque.