Todos, en
algún momento de nuestra vida, hemos tendido fiebre. Sin embargo, esto no tiene
por qué ser malo, lo cual no significa que en ocasiones prefiramos no tener que
sufrir el malestar que produce esta subida de la temperatura, ni arriesgarnos a
que esta suba demasiado.
A
continuación te mostremos algunos remedios naturales para bajar la fiebre,
soluciones fáciles para aplicar a partir de elementos que tenemos disponibles
en casa.
Té de lechuga:
Mantenerse hidratado también es posible gracias a los tés, que además pueden aportar muchas vitaminas y minerales. Uno de los más idóneos es el té de lechuga, que contiene potasio, calcio, magnesio, sodio y fósforo. Solamente es necesario hervir un litro de agua, y verterlo en un recipiente junto a una lechuga entera. Deja que repose durante un cuarto de hora y añadir edulcorante si es necesario, después está listo para beber.
Té de fenogreco:
El té de fenogreco o infusión de fenogreco aporta muchos beneficios para el organismo: reduce los sofocos y los síntomas menopáusicos, es rico en los minerales y las vitaminas y otros compuestos similares al estrógeno, y puede ayudar a reducir la fiebre. En este caso, pueden emplearse las semillas directamente, empleando dos cucharadas de éstas con agua hirviendo. Se deja reposar 5 minutos, se cuela y se consume a temperatura ambiente.
Ajo caliente:
El ajo
caliente puede ayudar a bajar la temperatura del cuerpo, pues favorece la
sudoración. En este sentido, ayuda eliminar toxinas y favorece la recuperación.
Este alimento tiene un efecto antibacteriano y antifúngico, por lo que se
convierte en un gran aliado del organismo para combatir las infecciones.
Para beneficiarse de este remedio, es posible picar un diente ajo y añadirlo a una taza de agua caliente. Después, hay que dejarlo reposar durante 10 minutos, colar y beber cuando esté listo. Este remedio, no se recomienda para mujeres embarazadas y niños pequeños.