Dada su
popularidad en la medicina tradicional, existe una variedad de remedios
naturales hechos con las distintas partes de este árbol de ciprés. Algunos de
los más conocidos son los mencionados a continuación.
El ciprés está compuesto por alcaloides, flavonoides, taninos, saponinas, fenoles y aceites esenciales que le atribuyen propiedades antioxidantes, antibacterianas, antivirales, antifúngicas, cicatrizantes y demás.
Infusión de ciprés para tratar venas varicosas:
Esta
preparación sirve para realizar compresas que se colocan en la zona afectada
para disminuir la inflamación.
Ingredientes:
- 10
gotas de ciprés.
- 1
cucharada de castaño de Indias.
- 1
cucharada de hamamelis.
- 2
litros de agua.
Preparación:
Mezcla las plantas con el ciprés e introdúcelas en una olla con agua. Hierve durante 5 minutos, deja reposar y procede a filtrar. Por último, empapa unas compresas y colócalas cuando estén tibias en las zonas de las várices de 2 a 3 veces al día.
Baño de asiento con ciprés para las hemorroides:
Un baño de
asiento consiste en sentarse en un recipiente poco profundo que tiene agua
tibia. Sigue cada uno de los pasos citados en el siguiente espacio para sacarle
el máximo provecho a este remedio.
Ingredientes:
- 10
gotas de aceite de ciprés.
- 6
hojas de hamamelis trituradas.
- 3
hojas de malva trituradas.
- 2
litros de agua.
Preparación:
Mezcla todas las plantas y el aceite de ciprés. En una olla, agrega 2 cucharadas de esta mezcla por cada 2 litros de agua. Hierve durante 5 minutos, deja reposar y cuela. Vierte la infusión en un recipiente y siéntate sobre él hasta que se haya enfriado.