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Los cuidados cotidianos evitan la sequedad, las futuras arrugas y descamación en las manos.
Las manos son la parte del cuerpo que más se resiente, ya que están presentes en la mayoría de nuestras actividades cotidianas, muchas veces no nos tomamos tiempo para cuidar nuestras manos y no recordamos que son las que más sufren por las inclemencias del tiempo, el trabajo, los quehaceres domésticos, etc.
Exfoliante de azúcar y aceite:
Otra receta para tener manos de seda que emplea elementos presentes en nuestra cocina. En este caso combinamos la acción exfoliante del azúcar con la suavizante del aceite.
Ingredientes:
- Aceite de oliva (16 g)
- Azúcar (20 g)
Preparación:
En un recipiente coloca el azúcar y echa el aceite de oliva a temperatura ambiente, mezcla bien hasta obtener una especie de crema arenosa, puedes echar más aceite si lo crees conveniente, luego aplica en las manos con movimientos circulares y tras 10 minutos, después enjuaga con agua tibia.
Crema de papa, miel y leche:
Hidratará la piel de tus manos de manera instantánea. Esta crema es mucho más eficaz que cualquiera de las que puedes conseguir en el mercado. Lo mejor de todo es que la puedes preparar en unos minutos con productos que seguro tienes en casa.
Ingredientes:
- Papa
- Miel (50 g).
- Leche (20 ml).
Preparación:
Pela la papa y córtala en cubos, cocina con agua hasta que quede tierna (como para hacer puré), filtra y echa en un recipiente junto a la miel y la leche a temperatura ambiente, tritura bien y mezcla hasta forma una crema, espera a que se enfríe (puedes meterla en la nevera unos minutos), aplica sobre las manos previamente lavadas y deja actuar 15 minutos, después enjuaga con agua fría o tibia.
Exfoliante de azúcar y miel:
Ambos ingredientes tienen propiedades más que interesantes para la piel ya que actúan como exfoliantes que remueven las impurezas. Si tienes la dermis muy sensible te recomendamos que los movimientos sean lo más suaves posible.
Ingredientes:
- Miel (75 g).
- Azúcar (20 g).
- Zumo de limón
Preparación:
En un recipiente coloca la miel y el azúcar, agrega el limón y remueve bien, lava las manos y a continuación, aplica mediante masajes, deja actuar 15 minutos y enjuaga con agua tibia.