El gobierno español anunció que usar mascarilla en interiores, salvo en el transporte público u hospitales, dejará de ser obligatorio desde el 20 de abril, en otro paso para tratar el COVID-19 como una enfermedad endémica.
El Consejo de Ministros del 19 de abril aprobará un decreto “en virtud del cual las mascarillas dejarán de ser obligatorias en los espacios interiores” a partir del “20 de abril”, señaló la ministra de Sanidad, Carolina Darias, al cierre de una reunión con responsables regionales de salud en Toledo.
“Llevar tapabocas seguirá siendo necesario en centros de salud, hospitales, residencias de ancianos y en el transporte público”, precisó.
De esta manera, España imita a otros países en los que dejó de ser obligatoria la mascarilla en interiores, pero lo hará una vez que pase la Semana Santa, durante la cual muchos españoles se reúnen en familia y suelen viajar.
La obligatoriedad de la mascarilla en interiores es una de las últimas restricciones todavía vigentes en España, un país que fue muy golpeado por la primera ola de la pandemia en la primavera de 2020, cuando los españoles quedaron bajo uno de los confinamientos más estrictos del mundo.