Dos jóvenes de 20 y 22 años, alcoholizados, ingresaron al cementerio municipal de Caleta Olivia, una ciudad en Argentina y abrieron el ataúd donde se encontraban los restos de un familiar fallecido por COVID-19 argumentando que querían “darle el último adiós”.
El hecho ocurrió el pasado lunes y fue observado por personas que se encontraban en el lugar visitando las tumbas de sus familiares quienes alertaron a la policía.
El féretro se encontraba en un nicho y los jóvenes quebrantaron todas las normas sanitarias y los protocolos vigentes por el COVID-19. Al llegar la Policía, ambos habían salido del cementerio, dejando el cajón abierto. Fueron detenidos a unas cuadras del lugar.
“Lo único que pudimos entenderles es que querían “darle el último adiós” a un familiar fallecido por COVID-19 ya que no pudieron hacerlo antes por las condiciones que están vigentes ahora y que no permiten realizar velatorios con la presencia de muchas personas”, afirmaron los agentes.
El personal del cementerio tuvo que esperar la llegada de personal de la funeraria para que siguiendo los protocolos volvieran a tapar el ataúd.