Foto: milenio.com
Existen
muchas razones por las que puedes sufrir de mal aliento y que son bien
conocidas, como el tabaquismo, alcoholismo y consumir alimentos como el café,
ajo o cebolla, sin embargo, existen otras causas que no se detectan sin la
ayuda de un especialista.
Sinusitis:
Las bacterias se pueden alimentar de las secreciones que provienen del rostro, lo que puede ocasionar mal aliento cuando las fosas nasales se obstruyen y la persona respira más por la boca, lo que puede ocasionar resequedad en la boca y con ella, saburra lingual.
Acumulación de alimentos en la amígdala:
Conocidas como cassis caseum o cassis amigdalar, son masas de color amarilla o blancuzco, formadas por residuos alimenticios y que se acumulan en las amígdalas, tienen un olor fuerte y desagradable.
Boca seca:
Esto se debe a que la saliva es necesaria para humedecer la boca, neutralizar los ácidos que produce la placa y llevarse las células muertas que se acumulan en las encías, lengua y mejillas, si la saliva no se las lleva éstas se descomponen en la boca y ocasionan mal olor, así que se debe tener especial cuidado con mantener húmeda la zona.
H. pylori:
Esta
bacteria puede ocasionar úlceras estomacales, pero también produce químicos
volátiles con base de azufre que causan mal aliento, como se demostró en un
estudio publicado en la revista Science Daily.