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Se dice que cuando entramos al tercer piso comienza la terrible “crisis de los 30”, ya sea porque comenzamos a darnos cuenta que “la vida adulta” no es tan fácil como creíamos, las responsabilidades, sentir que te quedas estancada, ¡y hasta te aterra subir de peso! Quizá ya notaste que tu metabolismo no es el mismo que el de antes, pero tranquila, te pasamos estos tips para acelerar tu metabolismo después de los 30 y mantenerte en tu peso.
Lo queramos aceptar o no, cada vez que cumplimos años también envejecemos, y sí, el metabolismo ya no es el mismo de antes porque su funcionamiento se va alentando y cada vez nos cuesta más trabajo perder esos “kilitos de más”, pero no te preocupes, te decimos varias opciones para acelerar tu metabolismo y conservar el funcionamiento de tu organismo en optimas condiciones.x
De acuerdo con MedlinesPlus, el metabolismo es un proceso natural del cuerpo que convierte todo lo que comes en energía y también define la velocidad en la que tu cuerpo quemará calorías. Esta energía la utilizamos para todo: para pensar, respirar, caminar, para la digestión, entre otras funciones, y la que no se utiliza se almacena en el cuerpo a través de grasa.
Antes de los 30 años el metabolismo suele trabajar mucho más rápido. Sin embargo, después de esta edad se ralentiza porque entra en una nueva fase.
Tips para acelerar tu metabolismo después de los 30 y no subir de peso
- Consume una manzana al día. Las manzanas son ricas en vitamina C, vitamina A, hierro, potasio, fósforo, calcio y ácido fólico. Estas propiedades te ayudarán a prevenir el síndrome metabólico, un trastorno que se asocia con una mayor grasa abdominal, enfermedades cardiovasculares y la diabetes. La cáscara de la manzana tiene una mayor concentración de fibra, la cual, reduce significativamente la grasa visceral localizada en el abdomen (esta es la que rodea a los órganos internos).
- Mastica los alimentos con calma. Hoy en día todos llevamos un ritmo de vida acelerado, pero, aunque no lo creas, no tomarte el tiempo necesario para masticar los alimentos podría generar una mala digestión. Además, al masticar alimentos quemas más calorías, porque forma parte del ciclo de la termogénesis, es decir, digerir, absorber, transportar y almacenar los alimentos, ¡despídete de los jugos que sustituyen el desayuno!
- Bebe agua. El cuerpo necesita agua para quemar calorías, si estás deshidratada tu metabolismo se hará más lento. Lo ideal es que bebas dos litros de agua al día.
- Utiliza aceite de oliva en la cocina. Las grasas solubles monoinsaturadas le ayudarán a tu cuerpo a funcionar correctamente para quemar las calorías que no necesita y evitar los “famosos rollitos” de la espalda o las “lonjitas”.
- Bebe té verde. El té verde aumenta la tasa metabólica, beber de dos a cuatro tazas al día te ayudará a quemar alrededor de un 17 por ciento más calorías de lo normal. En esta nota te decimos cómo prepararlo para adelgazar.
- Ríe todo lo que puedas y hazlo con sinceridad. Aunque te parezca sin importancia, ¡no es broma!, según un estudio de la Universidad de Vanderbilt, la risa puede lograr que aumente tu gasto energético entre un 10 y 20 por ciento por encima de los valores de reposo. Si eres de las personas a las que les encanta reír, ¡ya la hiciste! Lo recomendable es tener una dosis diaria de 10 a 15 minutos.
- ¡Actívate! El sedentarismo es uno de los principales motivos por los que el metabolismo se alenta, por ello, es importante que incluyas en tus actividades diarias al menos 30 minutos de ejercicio. Quemarás calorías al mismo tiempo que aceleras tu metabolismo, ¡un punto para comenzar a mover esas piernitas!
- Métele pesas a tu rutina de ejercicio. No, no te vas a “poner cuadrada”. Las pesas aumentarán tu masa muscular al mismo tiempo que quemas calorías y aceleras el metabolismo. Además, el levantamiento de pesas ayudará a fortalecer tus huesos y prevenir la osteoporosis. Sólo recuerda no levantar más peso del que debes porque podrías lesionarte (en esta nota te decimos cómo recuperarte de una lesión por entrenar en el gym).
- Evita desvelarte y duerme lo suficiente. Si sólo duermes un par de horas es momento de cambiar de hábito. Dormir de 7 a 8 horas es esencial para no sentirnos cansadas todo y estar más activas, y sí, no dormir bien afecta a tu peso porque puede provocar que durante el día te dé más hambre y sin darte cuenta comas en exceso, ya que, tu cuerpo requiere un extra de energía para seguir despierto.
Ahora que ya sabes qué hacer para acelerar tu metabolismo, por en practica estos consejos para evitar dar el “botonazo” y no llevarte decepciones cuando la blusa que tanto te gusta ya no te quede. Recuerda que cada cuerpo es diferente y que no verás cambios de la noche a la mañana, la clave es ser constante y aprender a querer tu cuerpo, ¡tu salud es primero!
Tomado de: Salud180.com