El turista que falleció tras lanzarse desde un acantilado de más de 20 metros de altura en el suroeste de Mallorca ha sido identificado como Mourad Lamrabatte, exfutbolista de 31 años del equipo neerlandés Vitesse, que actualmente jugaba en la Primera División de Países Bajos.
El equipo publicó horas después del fallecimiento un mensaje de condolencia en sus redes sociales en el que deseaba “fuerza y fortaleza” a los familiares del deportista, que acababa de cumplir 31 años y se encontraba con su mujer y sus dos hijos menores en el momento del accidente.
Los hechos ocurrieron en la zona de las islas Malgrats, un conjunto de pequeños islotes cerca de la costa de Calvià, en Mallorca, al que los turistas suelen acercarse para bucear o hacer rutas en kayak.
El futbolista y su pareja habían alquilado una embarcación para pasar el día en la zona junto a sus dos hijos menores. Sobre las dos de la tarde y mientras caminaban por el lugar, el exdelantero se lanzó al mar para alcanzar a nado uno de los islotes y decidió subir hasta la cima, de 22 metros de altura.
Una vez arriba, decidió lanzarse hasta el agua de un salto, pero no midió bien la distancia hasta el mar y se golpeó fuertemente contra las rocas de la parte inferior del acantilado antes de sumergirse en el agua, inconsciente por el fuerte choque.
El cuerpo del Lamrabatte se hundió a varios metros de profundidad nada más caer y no fue recuperado hasta unas horas después por el Grupo de Actividades Subacuáticas de la Guardia Civil, que se desplegó en la zona. Todo el suceso fue grabado con un teléfono móvil por la pareja del exfutbolista desde la embarcación, en la que también se encontraban los dos hijos menores de la pareja.