Audra Bear, una joven de 25 años de Minneapolis, Estados Unidos, asegura que hace ocho meses nutre su cuerpo solo del aire que respira, ya que según dice “obtiene energía de la respiración”.
“Hay algo mágico en la respiración consciente y controlada que te lleva a un encuentro cara a cara contigo mismo, te devuelve al núcleo de tu ser”, señala esta joven que antes fue vegana y que luego practicó por cuatro años el crudiveganismo, una dieta basada en alimentos crudos de origen vegetal.
Bear aclara que su intención nunca fue dejar de comer, pero que tras cinco días seguidos en los que practicó la respiración consciente, sus ganas de comer alimentos sólidos desaparecieron por completo, según dice a The Mirror.
La joven señala que su primer ayuno duró 97 días, en los cuales solo consumió te, jugos y batidos. Luego se percató de que no necesitaba los alimentos para vivir ya que la energía la absorbía a través de la respiración.
“Una fuerza dadora de vida que fluye, a través y alrededor de las cosas y que está en el aire que respiramos, la luz del sol, la naturaleza, las conexiones con las personas y todos los seres vivos”, afirma.
Sin embargo, la nutricionista Helena Gibson-Moore advierte que una dieta basada solo en batidos y jugos no es suficiente para lo que el cuerpo necesita.
“No hay evidencia de que podamos obtener los nutrientes esenciales necesarios solamente del aire”, asegura Gibson-Moore, quien advierte que restringir al organismo de los nutrientes necesarios puede traer consecuencias graves para la salud.
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