No se puede tomar zumo de limón y bajar de peso de forma mágica. No creas en esas soluciones instantáneas. Pero lo que sí puedes hacer es diagramar un plan para hacer una reducción progresiva de los kilos excedentes que afectan tu salud.
Si tomamos esta bebida en un momento adecuado, dentro de la pauta alimentaria que elaboramos para adelgazar, entonces nos dará una mano interesante.
El ayuno intermitente es un protocolo de alimentación que se estudia mucho en el campo de la nutrición y la medicina clínica por sus posibles efectos terapéuticos. Es decir, se trata de una forma de organizar la alimentación diaria que podría mejorar parámetros bioquímicos y metabólicos.
Consiste en realizar un ayuno programado, una vez al día, para concentrar las ingestas en unas determinadas horas. El modelo más estudiado y sugerido consiste en 16 horas de ayuno (solo tomando líquidos) seguidas de 8 horas de alimentación.
Si cumples tu ayuno intermitente entre la cena del día anterior y el siguiente almuerzo, prueba tomar agua con limón a la mañana. El horario no importa tanto, sino que lo hagas como método para causar sensación de saciedad y evitar que el hambre te haga abandonar el plan.