Seguro que comienzas a leer con escepticismo, no puede ser que las
satánicas redes sociales y el mundo digital vaya a suponer un alivio en nuestro
estrés y ansiedad diarias, ¿verdad?
Pues contrariamente a la creencia popular, el uso regular de las
redes sociales e Internet podría mejorar la salud mental entre adultos y ayudar
a evitar los graves trastornos psicológicos, como la depresión y la ansiedad,
según un nuevo estudio.
Las tecnologías de comunicación y las plataformas como Facebook
facilitan el mantenimiento de las relaciones sociales y el acceso a la
información de salud, lo que podría explicarlo, dice Keith Hampton, profesor de
la Universidad Estatal de Michigan.
¿Por qué la mala reputación?
Porque hasta ahora, los adultos no han sido el foco de
investigación sobre el tema. La mayoría de los estudios en las redes sociales
se han centrado en jóvenes y estudiantes universitarios.
Hampton explica que si solamente nos ceñimos a la instantánea de
la ansiedad de los jóvenes y que todos usan estas tecnologías, se ignoran los
cambios sociales más notables como las crisis económicas, el envejecimiento de
la población y cada vez “más padres protectores, más niños que van a la
universidad y el aumento de la deuda estudiantil”.
Por lo tanto, Hampton se propuso estudiar poblaciones más maduras,
analizando datos de más de 13,000 participantes adultos.
Descubrió que los usuarios de las redes sociales tienen un 63%
menos de probabilidades de experimentar un malestar psicológico grave de un año
al otro, incluida la depresión mayor o la ansiedad grave. Tener miembros de la
familia extendida en las redes sociales redujo aún más la angustia psicológica,
siempre y cuando la salud mental de los miembros de la familia no disminuyera.
El estudio, publicado en el Journal of Computer
Mediated-Communication, cuestiona la noción de que las redes sociales, las
tecnologías móviles e Internet contribuyen a una crisis de salud mental como se
dice alegremente.
“Hoy en día, tenemos estos pequeños fragmentos de información en nuestros teléfonos. Ese contacto continuo puede ser importante para la salud mental”, dijo Hampton.
Post: Sergio Osorio
Fuente: quo.es