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Cuando estás embarazada, es común escuchar a otras personas decirte que ya no volverás a dormir como antes o que aproveches tus horas de sueño lo más
que puedas, porque una vez con el bebé en casa será complicado volver a conciliar el sueño.
Pero no siempre tiene que ser así. Si bien es normal que el bebé despierte porque tiene hambre, está incómodo o su pañal está sucio, también es probable que estés cometiendo algunos errores que le impiden descansar adecuadamente. Conoce cuáles son para evitarlos y que tu pequeño se mantenga durante varias horas en los brazos de Morfeo.
5 errores que impiden que tu bebé duerma toda la noche
De acuerdo con los expertos, los bebés no tienen ciclos de sueño regulares hasta después de los seis meses. Es probable que de las horas que duerme, sólo un par sean seguidas.
A medida que tu pequeño crece, necesita dormir menos, no obstante cada bebé tiene necesidades de sueño diferentes.
Aprende a detectar los errores que estás cometiendo para que tu bebé y tú puedan tener mejores noches.
#1 No esperar antes de revisar al bebé
Los bebés, en especial los recién nacidos, suelen hacer ruidos porque balbucean, sienten molestias o se quejan, pero eso no siempre es señal
de que están despiertos. Muchas veces los papás se preocupan al escuchar algún sonido y corren a ver qué sucede. El error está en no esperar algunos minutos antes de responder a las quejas
del bebé. Esta intervención puede alterar el proceso de sueño del pequeño. Los expertos recomiendan esperar un poco para ver si puede volver a dormirse solo. Si pasan unos minutos y no se calma, acércate a él sin prender la luz. Probablemente tenga hambre, haya ensuciado su pañal
o no se sienta bien.
#2 Moverlo a su camita cuando ya está dormido
De acuerdo con expertos, es importante colocar al bebé en la cama cuando está por conciliar el sueño. Crear este tipo de rutina ayudará al pequeño a lograr
dormirse por sí solo, sin necesidad de arrullo. Toma en cuenta que si colocas al bebé en su cama cuando ya está dormido, al despertar durante la noche verá todo distinto, por lo que necesitará
ayuda para dormirse de nuevo. Lo recomendable es acostar al bebé adormilado en su propia cama, para que al momento en que se despierte durante la noche, pueda encontrar todo igual a como lo vio cuando estaba conciliando
el sueño.
#3 No jugar con él durante el día
Sí, apenas es un bebé, pero es importante hablar y jugar con tu pequeñín durante el día. Mantenerlo activo ayudará a extender las horas que
permanece despierto, por lo que podrá dormir por periodos más largos durante la noche.
#4 Dormirlo sólo con leche y arrullos
La leche y los arrullos serán tus aliados para calmar a tu bebé durante sus primeros meses de vida; sin embargo, cuando ha logrado tranquilizarse de forma independiente,
es importante quitar poco a poco ese apoyo a la hora de dormir. No eliminarlos a tiempo podría crear una dependencia hacia ellos, por lo que sólo podrá dormir con leche y arrullos, actividades que necesitará
a lo largo de la noche para poder conciliar el sueño. Puedes sustituirlos por abrazos y caricias dentro de su cuna.
#5 No tener una rutina
Los padres deben seguir una rutina constante al momento de acostar al bebé. De acuerdo con los expertos, la sobreestimulación por la noche puede crear dificultades para tranquilizar al pequeño durante las noches. Puedes recurrir a un baño, darle abrazos, poner luces tenues en la habitación
y leerle en voz baja. Estas actividades ayudarán a que el bebé se tranquilice y concilie el sueño de forma más rápida.
Lo más importante es que se tomen el tiempo para comprender al pequeño, sus hábitos de sueño y su forma de comunicarse. Con paciencia y constancia podrán ayudarlo a mantenerse dormido durante la noche.
Fuente: vix.com