La cebolla
es uno de los alimentos que no falta en la cocina de nuestros hogares y es que
además de ser uno de los ingredientes base en muchas de nuestras recetas,
también se trata de una fuente rica en vitaminas y grandes beneficios para la
salud.
Aunque sus
propiedades son mucho más efectivas si lo comemos cruda, también cocinado este contiene
propiedades ventajosas para nuestro organismo.
Alivia y combate enfermedades respiratorias y circulatorias:
No es de
extrañar que encontremos la cebolla como ingrediente fundamental en más de un
remedio casero. Esta hortaliza ayuda a aliviar y combatir enfermedades
respiratorias y cardiovasculares, así como también mejora la circulación
sanguínea.
Para resfriados o gripes, para la bajada de la tensión, o incluso como remedios caseros de belleza, la cebolla es un imprescindible en nuestra despensa.
Contra el envejecimiento:
Gracias a
las vitaminas que contiene, es un arma natural contra el envejecimiento y es
que vitamina C y B, así como las fuentes de ácido fólico, ayudan a combatir
esas temidas líneas de expresión. Una solución económica, sencilla y fácil de
encontrar, con la que dirás stop a esas primeras arrugas.
Controlador del peso natural:
Se trata de uno de los alimentos etiquetados como adelgazante natural. Un dato importante, pues la cebolla es depurativa, antioxidante, diurética y regulariza el buen funcionamiento del estómago, ayudando a digestiones mucho más ligeras y fáciles, así como a eliminar toxinas.