Foto: bbc.com
Investigadores
del Hospital Pediátrico Bambino Gèsu, del Vaticano, han descubierto el
mecanismo que provoca la grave respuesta inflamatoria por coronavirus en niños,
inicialmente confundida con la enfermedad de Kawasaki, lo que abre la puerta al
diagnóstico precoz con pruebas específicas y a un tratamiento.
El estudio, realizado por el Bambino Gèsu en colaboración con el Karolinska Institutet de Estocolmo, ha detectado las diferencias inmunológicas entre ambas enfermedades y sus resultados han sido ya publicados en la revista científica CELL.
Se hizo
evidente que algunos niños que contraen el virus pueden desarrollar una grave
forma de inflamación sistémica, una MIS-C que provoca una inflamación de los
vasos sanguíneos y problemas cardiacos e intestinales.
El estudio observó que ambas enfermedades alteran los niveles de citocinas (medidores de la inflamación) involucradas en la respuesta inmune, pero con algunas diferencias, por ejemplo la interleucina 17a, muy aumentada en los niños con la Kawasaki, no aumentaba en los pacientes con COVID-19 que si desarrollaban sin embargo una alta presencia de anticuerpos.
De los
resultados del estudio emerge la indicación de un tratamiento con
inmunoglobulinas en dosis altas para limitar el efecto de los anticuerpos, con
anakinra y cortisona en etapas tempranas para bloquear la inflamación secundaria.
Por el contrario, viene contraindicado el uso del tocilzumab y fármacos
bloqueantes del TNF-a.